1. Reconoce las cantidades vectoriales entendiendo que tienen magnitud y dirección. Representa las cantidades vectoriales por segmentos dirigidos y usa símbolos apropiados para los vectores y sus magnitudes (por ejemplo, v, |v|, ||v||, v). 

A veces, un número es suficiente. Tú sabes, ese sueño que tienes en el que todo lo que oyes, al parecer, es: "¡Treinta millones de dólares!" El resto del sueño es borroso, pero ese único número es suficiente para evocar imágenes de jets privados, vacaciones en el Caribe y la tan esperada suscripción a Netflix.

Otras veces, los números necesitan algo de ayuda. Necesitan dirección. Ahí es donde entran en escena los vectores. 

Los alumnos deben saber que los vectores son segmentos dirigidos, que tienen magnitud y dirección, lo cual significa que un vector no solo te indica cuán rápido está soplando el viento, sino también la dirección en que lo hace. 

Asimismo, deben conocer los símbolos de los vectores. (Los matemáticos aman los símbolos y los atajos, y los vectores no son una excepción). En vez de denominar a un vector AB, que es demasiado trabajo, los matemáticos prefieren denominarlo v (de "vector," obviamente). En general, las letras minúsculas en negrita representan vectores. 

Si los alumnos desean referirse a la magnitud, o la longitud, del vector, colocan el símbolo dentro de un valor absoluto doble: ||v||.

Se dice que dos vectores que poseen la misma magnitud y la misma dirección son equivalentes (aunque usamos un signo igual para representar la equivalencia). Los vectores equivalentes pueden pensarse como segmentos congruentes en líneas paralelas: la misma dirección y la misma longitud. 

La dirección de un vector se determina encontrando la pendiente del segmento entre su punto inicial y su punto terminal, mientras que la magnitud de un vector es la misma que la distancia entre sus puntos finales. Se dice que un vector está en forma estándar si su punto inicial es el origen.